Preparando la vuelta al cole

Encontrándonos en la recta final de las vacaciones escolares los preparativos para el nuevo curso se aceleran. Libros, material escolar, uniformes... son muchas las cosas que han de prepararse para iniciar el curso en los primeros días de septiembre. Junto a nuestros hijos y aportando una gran ilusión debemos organizar y planificar el nuevo curso.

Algunas familias tienen un trabajo añadido en dicha organización. Son muchos los niños con alergias alimentarias y para todos ellos los comedores de los colegios se encuentran, en su mayoría, altamente preparados para atenderlos. Menos, son los niños que padecen una enfermedad crónica que necesite de una atención especial durante el horario escolar. Y por desgracia, en este caso la mayoría de los colegios no se encuentran preparados o no están dispuestos a asumir sus cuidados.

Nuestros niños con Diabetes necesitan cada día, a lo largo de todo el curso, cuidados "especiales" Con un buen control, no tiene porque haber complicaciones y los cuidados resultan sencillos de aplicar.

 

- Medir los niveles de glucosa en las horas pautadas.

- Administrar la insulina prescrita, en el momento indicado.

- Tomar el tentempié (hidratos de carbono) según las pautas médicas.

 

Dependiendo de la edad del alumno, es posible que lo realice de forma autónoma, que lo realice bajo supervisión de un adulto o que sea el adulto el que tenga que realizar todo el proceso.

 

- Cuando el niño manifieste que se encuentra mal o el adulto que debe observar con una atención especial su estado, tenga dudas de que se pueda encontrar mal, habrá que repetir todo el proceso y actuar según las pautas marcadas en una tabla de valores que debemos proporcionar al profesor.

 

Ya tengamos un hijo pequeño o mayor, antes del comienzo del curso debemos marcar una reunión con las personas responsables del centro escolar.

- Si es su primer curso con diabetes porque haya debutado durante el verano, porque inicie su primer curso de infantil, o bien porque se trate de un traslado de colegio, nos debemos dirigir a la dirección del centro. Con toda la información posible sobre la enfermedad de nuestro hijo y con todas las indicaciones por escrito, claramente presentadas, de los cuidados que debe recibir a lo largo del día.

Necesitamos la mayor colaboración por parte del colegio y por ello debemos facilitar al máximo la atención que requiere nuestro hijo. Si no cuentan con un protocolo específico ni servicio médico es posible que de entrada se sientan un poco abrumados ante la situación y los miedos e incluso el rechazo inicial ante algo que se sienten incapaces de realizar, es comprensible.

Por ello es importante que aportemos toda la ayuda que necesiten, considero que una de las mejores opciones para el bienestar de nuestro hijo es que en un inicio uno de los papás o persona de confianza acuda al centro a realizar los controles pautados, de forma que el profesor se vaya acostumbrando paulatinamente a las necesidades del niño diabético.

- Es necesario mantener el contacto con los profesores de nuestro hijo de forma permanente. Aunque no sea su primer año con diabetes en el colegio, es importante concertar una cita antes del comienzo del curso para informar de los cambios que se hayan producido en la evolución y pauta de su control diabetológico.

 

Es momento de ir preparando toda la documentación que llevaremos al colegio con las pautas médicas y la forma de administración de su tratamiento, las medidas que se deben seguir en caso de hipo o hiperglucemia y en caso de emergencia.

 

No obstante, aprovechemos al máximo estos días de verano que nos quedan para disfrutar de los juegos al aire libre, de la playa y el descanso.