Porque estamos aquí...

Este espacio está dedicado a la diabetes infantil, con comentarios y artículos relacionados con la diabetes tipo 1.

Somos padres de una niña que debutó con diabetes tipo 1 en el 2011 recién cumplidos los tres años, la experiencia que nos da su cuidado diario y la formación continúa que desde un inicio hemos ido adquiriendo nos anima a compartir con todos vosotros este blog.

martes, 9 de julio de 2013

Disfrutando del verano sin descuidar la diabetes


Inmersos en este verano un poco atípico donde los días de altas temperaturas han llegado tras días nublados, con lluvia e incluso temperaturas más propias del otoño, nos vemos de nuevo o quizás por primera vez obligados a organizar la rutina veraniega para nuestro hijo diabético. Decir rutina cuando estamos hablando de verano y vacaciones es difícil de entender porque si algo identifica a los periodos vacacionales es que todos aquellos hábitos que mantenemos a lo largo del curso se pierden con la llegada de los días de playa y piscina.
Es importante entender que para el niño con diabetes es imprescindible mantener unas pautas, que variaremos bajo las indicaciones del especialista, adaptándonos a las circunstancias y a las actividades que se realicen dependiendo de la época del año en la que nos encontremos.
Es importante entender que la diabetes es una enfermedad que nunca duerme, que no da tregua y que su control tienen que ser constante.
Es importante entender que todas aquellas excepciones que realicemos en la alimentación son, como su nombre indica excepciones. Aunque estemos de vacaciones las cantidades de hidratos de carbono las debemos de respetar y sólo de forma ocasional debemos permitir algún extra. Para ello calculáremos las unidades de insulina que correspondan a la cantidad excepcional que se vaya a tomar. Respetando al máximo los horarios, el verano no se puede convertir en un picoteo constante.
Sin embargo no nos debemos olvidar que nuestro hijo diabético está de vacaciones al igual que todos sus amigos, que estamos en tiempo de poder disfrutar durmiendo un poco más por las mañanas y acostarse más tarde por las noches, de pasar largas tardes en la playa o en la piscina, de poder disfrutar tomándose un helado.... Por encima de todo no debemos olvidar que nuestro hijo es un niño con todo el derecho a disfrutar del verano, viviendo con diabetes pero no para la diabetes.

Hagamos pues un control responsable de la diabetes para que nuestros hijos puedan disfrutar de muchos, muchos veranos con una gran tranquilidad.

Feliz verano a todos!!




No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Quieres darnos tú opinión?